..jpg)
Su vida transcurrió en un salto fundamental en la patria Rusa. La estructura estatal zarista, vieja y chirriante se convirtió en un todopoderoso Estado de tremenda eficacia represiva. A pesar de todo este tumulto histórico que se originó en su país, consiguió abrir a duras penas grandes vías para los posteriores artistas, para el humanismo cristiano, la teología ortodoxa y católica... Florenskij tuvo que hacer frente a un creciente nihilismo que había penetrado en Rusia, además de una visión del arte desfigurada y a multitud de problemas que según su parecer se derivaban de la metafísica abstracta y su concepción tanto en el arte como en la religión.
Todo esto y mucho más ha sido recogido en un interesante número monográfico de la revista Númenor. El tomo 22 contempla tres facetas importantísimas dentro de este peculiar intelectual ruso: Florenskij como pensador, místico y mártir. Además ahonda en cuestiones donde el padre ortodoxo habla de la filosofía del lenguaje, del arte... todo ello alumbrado con una perspectiva cristiana y desde un punto de vista de acuerdo con lo que el llamaba realismo eclesial y metafísica concreta.
Recomiendo su lectura a cualquiera, y sobre todo a aquellos que como yo les apasiona la literatura rusa y somos completamente unos aficionados.
Filósofos (1917), pintura de Mijaíl Nésterov en la que representa a Florenski (de blanco y con bastón) junto a Sergéi Bulgákov.
No hay comentarios:
Publicar un comentario